Antes de fundar Rattan Ebike, Erik Yam llevaba diez años en el sector de las bicicletas eléctricas. Durante este tiempo, Erik no solo ha acumulado una vasta experiencia, sino que también ha infundido una profunda pasión en este negocio.

Cada verano, Erik se va de camping en bicicleta con su familia. No es solo un paseo, es una aventura familiar íntima: el paisaje, las risas alrededor de la fogata, todo se convierte en recuerdos compartidos, y Erik siempre lleva consigo su dron DJI para documentar este precioso viaje. Sin embargo, siempre que quería capturar los momentos más bonitos, se enfrentaba a un problema: los fuertes vientos del exterior hacían que el dron consumiera más batería y su bicicleta eléctrica no podía cargarlo. Esta sensación de impotencia le hizo pensar: ¿no existe una bicicleta eléctrica que le permita pedalear durante más tiempo y, además, cargar sus dispositivos diarios?

Durante sus numerosas experiencias de viaje y observaciones del mercado, Erik descubrió que las bicicletas eléctricas del mercado generalmente tenían baterías de menor capacidad y menor autonomía, lo que no satisfacía plenamente sus necesidades para largas acampadas. Esta confusión y necesidad se fueron gestando en su mente, y decidió desarrollar su propia bicicleta eléctrica de larga autonomía, compatible con acampadas, no solo para satisfacer sus necesidades personales, sino también para que más personas a las que les gusta acampar y montar en bicicleta disfruten de la misma comodidad y libertad.